Modelo de recompra de productos

Desde 2014 ANOVO y Carrefour han lanzado diferentes campañas de recompra de productos. Estas campañas incentivan la recogida de productos usados gracias a la reducción en el importe de compra de productos nuevos (móviles, ordenadores portátiles o videoconsolas), generando un impacto inmediato en la economía circular gracias a las siguientes acciones:

  • Captación de productos usados: Las campañas se orientan a productos definidos y acotados en un catálogo. Es decir, si la campaña es de venta de una videoconsola determinada, se valoran modelos anteriores de la misma tecnología. Principalmente se gratifican los productos funcionales, pero estas acciones motivan a que los clientes que poseen equipos no funcionales se animen a entregarlos para su reciclaje, lo que consigue que productos que muy posiblemente no iban a ser reciclados, finalmente sí lo sean gracias a estas campañas.
  • Screening de funcionamiento y reacondicionamiento: Por parte de ANOVO, una vez que el producto se recibe en nuestras instalaciones, es testeado y clasificado. En el caso de las consolas, tanto los mandos remotos como las propias videoconsolas. Una vez determinado el nivel de funcionamiento, si el equipo se encuentra averiado, es reparado siempre que la reparación sea técnicamente posible y, si no es posible, se reutilizan los repuestos y se envía lo que no puede aprovecharse para su correcto reciclaje. Este sistema garantiza el reaprovechamiento máximo del producto y de sus componentes.
  • Reintroducción de productos al mercado: Aquellos artículos que superan con éxito las pruebas de funcionamiento vuelven a  comercializarse, bien a través de ventas internas a empleados, plataformas de marketplaces o a terceros, proporcionándoles así una segunda vida.

La colaboración a través de esta campaña ejemplifica cómo Carrefour y ANOVO contribuyen al crecimiento económico y social, reduciendo las emisiones y promoviendo nuevos modelos de negocios basados en una economía sostenible. Estas acciones tienen un impacto positivo en la optimización de la vida útil de los dispositivos y, en definitiva, en la reducción del impacto ambiental.